El lugar donde todas las venas se encuentran

Qué no daría por volver a abrazarte, por mirarte con amor y con emoción en vez de sólo tristeza y decepción. 

Pude superar mis errores y ser alguien mejor no sólo para ti, sino para mí. Aún no sé si fue un golpe de suerte o una tragedia que todo esto ocurriera, porque tarde o temprano ibas a dañarme. Quizás fue mejor que ocurriera ahora a que cuando estuviéramos casados. 

Lo cierto es que sí existe el bien y el mal, y tener la capacidad de diferenciarlos, más allá de escudarnos en que somos humanos, es lo que nos hace ser mejores. Nos hace ser mejores que el vestigial humano primitivo de hace 300000 años. 

Mi visión de la vida es trascender, reconocer mis errores y aprender de ellos. Desbordar tanta pasión que pueda brillar en el corazón de los hombres. La vida llena de pasión es lo que pone a girar al mundo, no la mediocridad y las miles de excusas que se te puedan ocurrir para ocultar tus errores y fingir que es un acierto.  

No puedes sumergirte de cabeza a amar si no eres capaz de comprender y evitar el dolor de los demás, el verdadero amor está en todo lo que le puedes dar al mundo, no en lo que decides robar para ti y sólo para ti. Quisiera que si algún día encuentro alguien con quién pasar el resto de mi vida, que comparta éste pensamiento, que sea capaz de amar tanto que no tema a sacrificar una parte de sí por el bienestar de los demás. Qué esta característica no sea algo que ésta persona admire de mí, sino algo para poder compartir y vivir. 

Diferenciar el mal del bien significa ser justo, cosechar lo que cultivas. Nunca me cansaré de dar a cada quien lo que merece, de la manera en la que yo soy. Sin necesidad de empuñar armas, la inteligencia es más precisa que cualquier bisturí. 

Somos seres sociales, así hemos evolucionado y así hemos llegado a ser lo que somos hoy en día. Gracias a que somos seres sociales es que hoy puedes despilfarrar dinero que no es tuyo en todos tus caprichos. Ese gasto, que aunque siendo consiente del daño que le haces a otras vidas, aún así decides tomar. La vida no es vivir locuras que sólo te traerán placer a ti, la vida es tan diversa e increíble que tienes miles de formas de ser feliz sin que nadie sufra, sin que nadie pase las noches llorando o en preocupación. Vivir no consiste en centrarte en tu felicidad a costa de las lagrimas, la preocupación o la angustia de alguien más, y mucho menos a costa del dolor de las personas que te aman. En eso sí consiste madurar. 

¿Cuál es el sentido de traer un hijo al mundo si con ello eres consiente de que le estás quitando la comida a otras personas que no conoces, otras personas que también sienten, otras personas que también sufren?. 

Si yo pudiera evita el dolor del mundo, lo haría sin dudarlo. Para egoístas están las millones de almas pobres, las que tienen necesidades terrenales básicas, las que no pueden escapar de sus vicios, las que están esclavas de la avaricia, avaricia de diferentes formas y colores. 

Todos tenemos sueños, todos tenemos anhelos. Pero hay tantos sueños por cumplir que dudo que exista alguien que cumpla con todos, a su vez, tantos sueños que deberían quedarse en sólo eso, sueños. Divina es la capacidad de poder elegir, de poder superar nuestros deseos más básicos. El razonamiento es un don más no un adorno, el motor de nuestra evolución. Y es por ello que también tenemos la capacidad de elegir nuestros sueños, de detenernos a pensar en lo bueno y en lo malo que traen nuestros más grandes deseos a quienes amamos o alguna vez dijimos amar, e incluso, a aquellos que ni siquiera conocemos. ¿Cuál es el sentido de pisotear a los demás sólo por alcanzar tu felicidad? es exactamente la misma práctica en la que educan a las personas aquí "El vivo vive del bobo", sólo que mutado en otra forma más perversa y disfrazada con psicología barata, sacada de algún video de Tiktok en donde transforman al egoísmo en algo positivo. 

Comparto mi felicidad y comparto mi pasión con todos los que me rodean, y gracias a ello la gente me ha dado la mano cada vez que lo he necesitado. Mi perseverancia ha hecho que la gente me acoja y me abran muchas puertas. 

Ojalá algún día pudieras mostrarle al mundo la pasión de la que estás hecha, es injusto perder las oportunidades por no haberle mostrado tu mejor etapa al mundo. Siempre hay formas de volver a comenzar, siempre vas a poder brillar, no importa cuántas veces te digan que no, yo que te he conocido mejor que nadie sé de lo que estás hecha. Porque la verdad es que no hay nada que me enamore más que la pasión desbordada. 

Sólo recuerda que todas las personas son valiosas y que todas tenemos sentimientos. Recuerda que cuando se hiere a un inocente, la manada reacciona de manera hostil, y, desafortunadamente, suele ser una reacción en cadena que lleva a consecuencias muchas veces injustas. Somos seres sociales, evolucionamos. 

Qué bonito es ver que aún se puede seguir viviendo, pareciera como si la pasión la caracterizara una motilidad caprichosa. Un día la encuentras anidada y volando, y al otro día con raíces y aromas diagnósticos. Exhibir al sol todas esas piezas que conforman lo que eres, mostrar que no sólo eres bueno en una cosa, que no sólo eres bueno amando de una forma en particular, eso también es bonito, te motiva y te llena de esperanza. A veces me enredo en un único papel, pero cuando todo esto está opacado por la tristeza, parece que es mejor darles un descanso y sacar a relucir esos otros sentimientos bonitos y talentos a los que no les das tanta atención. 

Qué bonito es caminar por el único lugar por el que siempre he andado. El lugar donde todas las venas se encuentran, calmando las penas y sacándolas de la vida poco a poco. 

Grandes decisiones, un hito en tu historia

Ojalá realmente aprendieras de la sabiduría de tu padre, más que sólo publicarla cómo si tuvieras el derecho moral de predicarla. Aún te quedan otros 27 años más para que no te tiemblen las manos, no salgas a hablar frente a todos cómo si fueras un maestro. 

La vida es una locura. Un día puedes tener un gran hombre a tu lado, alguien que haría todo lo que desees, una persona casi intachable, de un gran corazón. Y al otro, jajaj, lo cambias por un misógino que acosa a cada mujer que sube fotos a sus historias en redes sociales, uno que contrata prostitutas, que comparte porno en grupos de hombres, uno que habla mal de ti a tu novio. Oh si, esa es la mejor parte. Recuerdo que alguna vez le pedí a Carlos que nos sentáramos a hablar, pues me sentí siempre en paz cuando hablaba con él (qué estúpido fui). Algunas de las palabras del tipo fueron "Usted es un gran hombre parce, no tiene que rebajarse a la altura de una niñita perdedora que es Diana", "Véala, entró con usted y donde está" "Todas las viejas son putas, esfuércese en mejorar por usted esa vieja vale verga" "Esa vieja no sabe lo que quiere en la vida". 

En fin, decidiste alimentar al lobo negro y recibirás lo que eso conlleva. Ya quiero ver cuando te trate mal y se excuse contigo diciéndote que lo hace por ser "Santandereano" y que esa es su personalidad. O quizás la sorpresa te la lleves cuando discutas con él y termine orinándote la ropa que echaste a la lavadora. Ese sí que es un clásico. 

Predicas de la depresión, pero no te importó destrozarme el alma metiéndote con mi mejor amigo, la incoherencia ahora es una de tus características emblema, casi que eres un sinónimo de la palabra. 

Eres tan ilusa e irracional que te metiste con un hombre que celebra frente al único amigo que lo tolera, que te cogió, felicidades por eso, pasaste de ser una medio persona a ser un objeto. 

Te arrepentirás de no haber luchado por mí, toda tu vida. Soy muy superior a ese remedo por el que me cambiaste. Y me darás la razón, cómo siempre lo haces aunque te arda aceptarlo (como siempre). 

Tranquila, no tienes por qué dudar de mis palabras, por que a diferencia tuya, yo no soy un mentiroso. Por el contrario, me encanta hablar con la verdad que incomoda. 

Al límite de la muerte y el alivio que sólo brinda el amor

Escrito del 19 de Enero de éste año

Al límite de la muerte

No sé muy bien por dónde empezar éste escrito, hay muchas cosas por relatar que nunca había experimentado en la vida. Sí bien, mi memoria está más cerca de brillar por su pobreza que por su calidad, los sentimientos más intensos son marcas que se quedan para siempre, sean buenos o sean malos. 

Éste último mes estuve sentado en el límite de ambos extremos de la existencia, particularmente de la muerte. Tuve mucho miedo como nunca en la vida lo tuve, tan orgulloso que siempre he sido como para que en ésta ocasión mostrara mis sentimientos en crudo a alguien ajeno a mi amor.

He vivido momentos que me han doblegado y me han dejado en el piso, pero ninguno como este. De la nada estaba planeando un suicidio, con la idea dando vueltas en mi cabeza cómo un ciclón. Busqué a mi mejor amigo para contarle mientras lloraba: otra vez estaba pasando, otra vez me había ilusionado con un futuro feliz, y tan fácil cómo vino, más fácil aún se estaba escapando. Nunca había sentido físicamente un dolor cómo ese, una explosión química que de inmediato me puso a temblar y a llorar, a revolcarme en mi silla, y a soltar todos mis pensamientos sin detenerme a ver qué salía de mí desesperación. 

La idea era sencilla: caminaría en la noche por el bosque mientras daba mis últimos lamentos por lo que nunca fue; unos pasos de malabarista, hipócritas al fin de cuentas, hasta llegar a la mitad del lago, en dónde me dejaría deslizar hasta caer al agua, y en el fondo, dejarme atrapar por esa vegetación que le brindó un hogar a mi otro gran amor. 

Tuve miedo, y recé. 

Recé para tener fortaleza, recé para que se me borrara de la mente esa idea que me ahorcó hasta el límite que la vida misma lo permitía. En mi mente ni siquiera había espacio para considerar razonamientos o ideales que contradijeran lo que estaba haciendo, simplemente lo hacía mentalmente mientras lloraba, mientras le pedía a ella que no me dejara solo, que no me dejara a solas conmigo mismo y con el millón de desesperanzas que maquinaba mi cabeza. 

¿A quién se le ocurre hablarle a una persona de mejoras a largo plazo y de quererse a sí mismo en un momento en el que la mecha ya se encendió?, y que lo único que necesita es que alguien la apague lo más pronto posible y como sea. Es decir, ya no hay futuro, si una persona te dice que se va a matar es porque ya no hay chance alguno de adoptar esos discursos baratos de superación, porque ya no hay un mañana para intentarlo. 

En fin, las cosas no ocurrieron cómo me lo venía imaginando en las largas 9 horas de viaje. Sin embargo, el miedo no se iba, siempre pensaba que al día siguiente nuevamente me diría adiós. Fue cuando caí en cuenta de todo en lo que me había convertido: un retazo de varias docenas de inseguridades. 

Cada día que pasaba a su lado regresaba a mí la tranquilidad, no obstante, siempre surgía la duda y yo sabía que tenía que soltarlo inmediatamente en cuanto aparecía, aunque por dentro hubiese algo que me dijera que hablarle de mis sentimientos sólo la alejaría otra vez de mí, como la última vez. 

Sería más fácil la vida si nuestra mente fuera un libro abierto, o más que eso, una base de datos abierta a todos y con acceso en todo momento y en cualquier lugar. Tal vez así la empatía aparecería con un poco más de frecuencia. Tal vez así alguien a quien le dices amigo (a pesar de los acontecimientos) piensa no sólo en su bienestar, sino también en lo que te hace daño a ti y evita hacer esas cosas que te hieren igual que un puñal a fuerza desgarrando el corazón, por ejemplo. 

El alivio que sólo brinda el amor

La verdad me duele mucho que digas que desearías tener cosas que me esfuerzo por darte

aunque en algún momento dudes con que unos malditos papeles armados por un oportunista valen más que todo lo que yo siento por ti, oportunista a quien decidiste mostrar tus debilidades y que no dudó ni un segundo en sacar provecho de ellas. 

Sin salir mucho de ésta idea, qué increíble sería que no tuvieras que dudar ante la realidad irrefutable de que eres lo más importante en mi vida. 

Me frustra decirte todos los días y todo el día lo que siento y que tú no te sientas amada, que pienses que no tienes alguien 

El solo hecho de estar escribiendo esto y publicarlo me produce miedo, me produce miedo pensar que una vez más ante tus ojos sería un pobrecito y que abandonado y solo en la vida me iría mejor, para eso del crecimiento del que todos hablan y hablan sin parar. Nada me parece más absurdo que ocultar la verdad, y es por eso que muestro lo que viví, pensé y sentí, aunque toque escudriñar un poco. Total, solo deseo que tú lo sepas, y que cuando lo descubras me abraces tan fuerte que, sin palabras, yo sepa que nunca más me soltarás. 

Esto se quedó incompleto, porque me pudo más la tristeza de pensar que no soy suficiente para tu corazón

 

El Viejo YO

Siento cómo vuelve la seguridad, la autoestima que perdí e incluso más. Abrir los ojos es algo básico en la vida para sobrevivir, y es tan sencillo e intuitivo que raya en lo absurdo pensar en que tenemos siquiera una pizca de voluntad al hacerlo. 

Diría que hoy es el último día que te lloro, pero ni eso pienso hacer, ese día ya se arrancó del calendario para no volver. 

Sigue convencida que me tendrás de rodillas a tus pies para toda la vida, para que te estrelles más duro con la realidad. 

Qué pérdida de corazón fue el tener impregnado mi hogar, su brisa, sus flores y hasta sus aves con tu recuerdo. No voy a decir que nunca te lo mereciste, porque sí fue así, te mereciste no hace mucho tiempo cada estrella en el cielo y cada canto del tucán en la mañana. Pero en poco tiempo perdiste esa esencia que te hacía única entre todas. En sólo tres meses te perdiste entre tus vicios y tus amigos de mierda, el títere más fácil de utilizar por la basura que orgullosos te hablan día a día sobre cómo comportarte y hasta cómo respirar. 

Eras tan original y única, capaz de nadar a contracorriente entre éste río de desperdicios, pero diste media vuelta y cómo una clavadista profesional caíste con placer entre montones de desechos formados con los discursos baratos que los niñitos libertinos excretan por la boca. 

"Ella tiene mucho carácter" solían decir los que te conocían, pero ahora eso sólo te lo dices tú misma para convencerte que tus "grandes decisiones" en la vida son hazañas para memorar e ir corriendo a contarle a los oportunistas que llamas amigos. Ábrele la puerta al primer drogadicto que timbre a tu casa para hablarte de la biblia y la moralidad.

♣

El viejo Yo, el que no tiene ni la más mínima necesidad de montar obras de teatro, copias baratas de otros para fingir grandeza frente a los demás. Mi sola presencia cambia la dirección del viento a donde quiera que vaya. Con fluidez y elocuencia vuelvo a ser yo, el latir en algún corazón ajeno, cansado de la mierda de turno. El consejo del justo, el consejo que abriga y fortalece. Ese soy yo, el que nunca debió haberse perdido entre tus caprichos y egocentrismo forzado. 

Viví una falsa realidad, me engañé por amor. La pregunta ahora es ¿Qué es lo que sigue?. Tal vez sólo dejarme llevar hacia caminos nunca explorados. Ahora las reglas cambiaron. 

No regreses aquí, porque la curiosidad y la culpa te podrían jugar una mala pasada. 

♣

Y tú, ¿Qué es lo que ocultas detrás de tus toques de maldad y desinterés? ¿Cómo es que eres capaz de captar mi atención por horas y no cansarme? ¿Realmente eres lo que muestras ante el mundo y es ese interés que despiertan tus ojos en mí, la atracción del opuesto?. Cada hora que paso conociéndote me acerca más a ti y es más la curiosidad que me inquieta por probar lo diferente que eres de mí. El caminar sigiloso de una mente brillante que compite con la belleza innata. Tu sonrisa y la mía cada que me miras fijamente desde el otro lado del cuarto.

Desordenar las fichas en el tablero y cambiar sus roles, es lo único que necesitaba para que renaciera en mí ese precioso recurso de la tranquilidad.  El Amor fati, de eso siempre se trata. 

Sean felices 😁