El Viejo YO

Siento cómo vuelve la seguridad, la autoestima que perdí e incluso más. Abrir los ojos es algo básico en la vida para sobrevivir, y es tan sencillo e intuitivo que raya en lo absurdo pensar en que tenemos siquiera una pizca de voluntad al hacerlo. 

Diría que hoy es el último día que te lloro, pero ni eso pienso hacer, ese día ya se arrancó del calendario para no volver. 

Sigue convencida que me tendrás de rodillas a tus pies para toda la vida, para que te estrelles más duro con la realidad. 

Qué pérdida de corazón fue el tener impregnado mi hogar, su brisa, sus flores y hasta sus aves con tu recuerdo. No voy a decir que nunca te lo mereciste, porque sí fue así, te mereciste no hace mucho tiempo cada estrella en el cielo y cada canto del tucán en la mañana. Pero en poco tiempo perdiste esa esencia que te hacía única entre todas. En sólo tres meses te perdiste entre tus vicios y tus amigos de mierda, el títere más fácil de utilizar por la basura que orgullosos te hablan día a día sobre cómo comportarte y hasta cómo respirar. 

Eras tan original y única, capaz de nadar a contracorriente entre éste río de desperdicios, pero diste media vuelta y cómo una clavadista profesional caíste con placer entre montones de desechos formados con los discursos baratos que los niñitos libertinos excretan por la boca. 

"Ella tiene mucho carácter" solían decir los que te conocían, pero ahora eso sólo te lo dices tú misma para convencerte que tus "grandes decisiones" en la vida son hazañas para memorar e ir corriendo a contarle a los oportunistas que llamas amigos. Ábrele la puerta al primer drogadicto que timbre a tu casa para hablarte de la biblia y la moralidad.

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El viejo Yo, el que no tiene ni la más mínima necesidad de montar obras de teatro, copias baratas de otros para fingir grandeza frente a los demás. Mi sola presencia cambia la dirección del viento a donde quiera que vaya. Con fluidez y elocuencia vuelvo a ser yo, el latir en algún corazón ajeno, cansado de la mierda de turno. El consejo del justo, el consejo que abriga y fortalece. Ese soy yo, el que nunca debió haberse perdido entre tus caprichos y egocentrismo forzado. 

Viví una falsa realidad, me engañé por amor. La pregunta ahora es ¿Qué es lo que sigue?. Tal vez sólo dejarme llevar hacia caminos nunca explorados. Ahora las reglas cambiaron. 

No regreses aquí, porque la curiosidad y la culpa te podrían jugar una mala pasada. 

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Y tú, ¿Qué es lo que ocultas detrás de tus toques de maldad y desinterés? ¿Cómo es que eres capaz de captar mi atención por horas y no cansarme? ¿Realmente eres lo que muestras ante el mundo y es ese interés que despiertan tus ojos en mí, la atracción del opuesto?. Cada hora que paso conociéndote me acerca más a ti y es más la curiosidad que me inquieta por probar lo diferente que eres de mí. El caminar sigiloso de una mente brillante que compite con la belleza innata. Tu sonrisa y la mía cada que me miras fijamente desde el otro lado del cuarto.

Desordenar las fichas en el tablero y cambiar sus roles, es lo único que necesitaba para que renaciera en mí ese precioso recurso de la tranquilidad.  El Amor fati, de eso siempre se trata. 

Sean felices 😁